Accesibilidad e inclusión hacen de la Biblioteca Central de Minneapolis un punto de referencia para la comunidad y un laboratorio de aprendizaje

Como resultado de un proceso público colaborativo, la Biblioteca Central de Minneapolis entreteje la trama urbana del condado de Hennepin. Constituye el corazón de un sistema de 14 bibliotecas que da un nuevo impulso a la idea de una gran biblioteca urbana dotándola de conectividad, accesibilidad y atractivo para las nuevas generaciones. Su icónico diseño celebra la importancia de la comunidad y mejora la experiencia del usuario combinando áreas de acceso a las estanterías con espacios para la participación y reunión comunitaria.

Conexión a través de un atrio central

El corazón de la biblioteca es un atrio acristalado de seis pisos que atraviesa el edificio, llenándolo de luz y actividad. El atrio separa y conecta las áreas más concurridas de la biblioteca, como las salas de lectura ubicadas en el volumen norte y las oficinas privadas y áreas de almacenamiento en el volumen sur. La separación intencional genera espacios de reunión para eventos sociales con comida y música mientras protege las estanterías de libros y promueve espacios altamente funcionales.

“El edificio es una magnífica combinación de elegancia y funcionalidad. Obtuvo evaluaciones positivas del personal desde el día en que nos mudamos y continúa recibiendo elogios del público. Es un éxito como biblioteca, como principal centro de reunión comunitario y como un maravilloso bien patrimonial para la ciudad.” - Kit Hadley, ex directora, Biblioteca Central Minneapolis

Anticipándose a la expansión del programa de bibliotecas públicas

A través de sus diferentes espacios dedicados a grupos específicos, la Biblioteca Central de Minneapolis funciona como una plataforma de prestación de servicios en permanente evolución. Por ejemplo, el Centro para los Nuevos Americanos ofrece clases de inglés y capacitación laboral para inmigrantes recientes mientras que Servicios Comerciales apoya a quienes buscan empleo, propietarios de pequeñas empresas, inversores e investigadores de patentes. Hasta el 40 por ciento de los visitantes de la biblioteca utilizan la biblioteca para fines comerciales. La señalización intuitiva entrelaza estos espacios utilizando tres idiomas que pueden adaptarse en función de los cambios demográficos.